ADA contemplará los efectos del cambio climático en todas sus actividades

21 Julio 2022 Proyectos
Campo árido. Copyright: Shutterstock

En el marco del plan estratégico 2022-2025 de ADA, el cambio climático, los temas de género y el uso de las tecnologías digitales serán contemplados en todos los proyectos y programas como objetivos generales. 

Dar la debida consideración a los riesgos climáticos resulta particularmente importante para garantizar la sostenibilidad de las políticas y programas de desarrollo. Por ello, ADA velará para que sus actividades tengan una huella de carbono baja y se afanará en todo momento en aumentar la resiliencia de las poblaciones objetivo al cambio climático al tiempo que persigue otros objetivos más específicos de cada programa. 

Las cuestiones relativas al cambio climático resultan particularmente relevantes en los proyectos dirigidos a los actores de las cadenas de valor de la agricultura y la silvicultura, en la medida en que la productividad agrícola se ve especialmente afectada por el cambio climático mientras que un porcentaje significativo de las emisiones de gases de efecto invernadero es fruto de la sobreexplotación de la tierra. En vista de ello, ADA promoverá prácticas agrícolas climáticamente inteligentes así como una gestión sostenible del suelo para mitigar los efectos del cambio climático e impulsar la resiliencia de los pequeños productores.

Además, ADA fomentará la gestión sostenible de los paisajes, tierras cultivables y bosques, impulsará la generación de energías renovables y promoverá viviendas, maquinaria y electrodomésticos eficientes energéticamente.

Microcréditos verdes: lecciones aprendidas 

Si bien ADA ayuda desde 2011 a las instituciones microfinancieras (IMF) a desarrollar productos de microcréditos verdes, el hecho de comprender que el lanzamiento de productos verdes requiere mayores inversiones que otras medidas de diversificación de productos financieros le ha llevado a replantearse su enfoque y ampliarlo. 

Antes de desarrollar un producto, han de considerarse multitud de factores externos, como las políticas públicas medioambientales y agrícolas, así como los planes de electrificación (no solo en las zonas rurales) para garantizar la relevancia y potencial viabilidad de dicho producto a medio plazo. Además, se necesita un amplio abanico de partenariados con proveedores tecnológicos y organizaciones de desarrollo de capacidades. 

Una vez desarrollados, los productos de financiación verde requieren un enfoque promocional específico en la medida en que los clientes tienden a priorizar sus necesidades económicas sobre los beneficios ambientales. Los intercambios entre homólogos y las demostraciones prácticas de nuevos equipos y soluciones resultaron ser las actividades más eficaces en los proyectos pasados. Por último, se ha de formar al personal sobre el terreno para que comprenda y pueda concienciar sobre los beneficios económicos y ambientales y compensarle a continuación por dicho esfuerzo adicional. 

Hacia unas finanzas inclusivas y climáticamente inteligentes 

Basándose en dichas experiencias, ADA adoptará un enfoque más holístico en el marco de su plan estratégico actual y se afanará en desarrollar soluciones financieras inclusivas y climáticamente inteligentes en lugar de centrarse exclusivamente en los microcréditos verdes:

  • Además de facilitar el acceso a los servicios financieros, los socios locales de ADA formarán a los usuarios finales en prácticas domésticas y productivas sostenibles y fomentarán el uso de equipos y tecnologías eficientes energéticamente.
  • Si bien ADA se apoyó fundamentalmente en las IMF en el pasado, recurrirá a partir de ahora a un mayor número de actores para garantizar un apoyo más holístico a los beneficiarios.
  • En lugar de centrarse en exclusiva en la agricultura, ADA considerará todos los aspectos del paisaje, como la silvicultura y la biodiversidad, para abarcar la complejidad del cambio climático y las cuestiones ambientales. 
  • Además de los microcréditos verdes, se considerará un abanico más amplio de mecanismos de financiación, como la inversión climática y la financiación al carbono con miras a ofrecer soluciones más dirigidas a retos climáticos específicos.